martes, 8 de julio de 2008

la emoción

nunca me había sentido así...

el corazón me latía con una fuerza descomunal...
poco a poco me fui calmando, aunque sin perder esos nervios internos...

nervios por la emoción, la emoción de disfrutar una vez más de su música, pero desde otra perspectiva, una mucho mejor...

un concierto que no se puede explicar con palabras, o se disfruto allí en directo o nada.
las palabras se quedan muy cortas para explicar lo que sentí durante esas 2 horas de concierto...

mi mente no podía estar en otro lugar que no fuera aquel, sus dedos me hipnotizaban y su música hacía que se te olvidara hasta pestañear...

el aliento contenido de toda una sala, tantas miradas clavadas en él, respiraciones cortadas, y de repente...el aplauso masivo, las caras felices de muchos, sonrisas, caras de sorpresa...

y su mirada clavada en mí, con nuestra canción...


y yo allí...
orgullosa de él...
con cara de satisfacción por poder compartir mi vida con una persona tan especial, con esa persona que a tantos nos emociona con su música, con sus gestos, con sus palabras...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi vida,
El año pasado me sentí muy incómodo durante mi concierto en ese mismo festival.

Misma sala,

casi la misma gente,

una guitarra, aunque no la misma,

y lo más importante...

Tú.


Tú estabas allí.

Tú fuiste causante de todo aquello.

Tú me viste estudiar.

Tú aguantaste mis nervios.

Tú me animaste a seguir.

Tú me llenaste de alegría.

Tú me diste la paz que mi alma necesitaba y ansiaba...

Por todo esto y mucho más,

GRACIAS!

Te quiero como nunca...